Excursión

He vuelto, mis últimos meses no han sido idílicos y pronto escribiré sobre ellos con calma porque ciertas experiencias necesitan su tiempo y espacio.

Hoy quiero escribir sobre el maravilloso mundo de las oposiciones, ese mundo donde todo el mundo se mata a estudiar no sabe ni muy bien para que y que culmina el día del examen…ese maravilloso día donde la gente va con su boli, su DNI y su cara de felicidad, no de nervios no, de felicidad.  Gente que con toda la familia estaba allí desde el domingo mañana con los nenes, en los puestos que se pusieron en el recinto ferial y como si fueran de domingo , había hasta puestos de churros.

Mi experiencia ha sido curiosa.

Para comenzar pensé pasar nervios, pues no, pase hambre y sobre todo frío en un día lluvioso de Silleda, en un recinto para ganado habilitado para hacer el examen, no es broma, esto es Galicia.

Hora de la llamada 15:30, así sin contar que la gente que venimos de lejos tenemos que hacernos un plan, desayuné pero no pude comer nada hasta la salida de la prueba , no soy persona de comer a las 12 y una vez en el recinto las opciones son limitadas y churros no era una opción  , salí a la una en un bus porque no conocía el lugar, llegamos a las tres con el tiempo justo de localizar nuestra puerta entre dos naves de ganado grandes, nos pasaron adentro llamando uno por uno y pasandonos por un detector de metales, cuando empezamos a hacer el examen  eran casi las cinco, una hora alli entre puertas abiertas con una corriente de aire alucinante y esa humedad de Silleda que cala los huesos.

Hacemos el examen, dos horas y media de tiempo pero mucha gente a partir del minuto uno ya lo entregaban y hacían sonar aquel portazo de hierro contra hierro que te robaba toda la concentración, a partir de la hora de examen esas malditas puertas suenan seguido teniendo que leer cosas dos veces…..yo creo que esto ya es mala leche de la organización porque mucha gente dudo que se concentre en estas condiciones .

En toda Galicia no hay unas aulas universitarias en cada ciudad para, primero, no tener que viajar, segundo, tener unas instalaciones adecuadas con calefacción por lo menos, no una nave de ganado gigantesca llena de corrientes de aire, puerta ensordecedoras, tableros mal puestos con betas entre los tablones que hacian que las lineas del boli no fueran rectas, sin sillas de plástico que se rompía solo mirándolas, la mía resistió conste…..

Por último hacer una pregunta, con 20 euros para organización que cobrasteis como tasa que haceis en serio ….

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